- Es un escudo protector para enfermedades respiratorias y estimula el sistema inmunológico del recién nacido.
La lactancia es el acto de amor que más nutre y protege al recién nacido, pues la leche materna contiene células y anticuerpos provenientes del sistema inmunológico de la madre.
El Dr. Álvaro Basurco, cirujano pediatra de Sisol Salud de la Municipalidad de Lima, manifestó que este alimento tiene inmunoglobulinas que protegen a los bebés contra enfermedades como la neumonía, la diarrea, alergias, infecciones respiratorias y del oído, entre otras.
“Amamantar inmediatamente después del nacimiento es importante porque el sistema inmunitario de los recién nacidos aún no está del todo maduro; la leche materna ofrece protección inmediata, así como la estimulación del sistema inmunológico. Es por ello que la lactancia materna es como la primera vacuna”, enfatizó el especialista.
En el marco de la Semana Mundial de la Lactancia Materna (del 1 al 7 de agosto), se detallan sus beneficios:
- Disminuye el riesgo de desnutrición y muerte súbita, y es de fácil digestión.
- Tiene la mejor biodisponibilidad de hierro, calcio, magnesio y zinc, favorece el desarrollo emocional e intelectual del bebé y previene problemas de salud mental a futuro.
- Disminuye la probabilidad de desarrollar enfermedades crónicas como la obesidad, la diabetes, enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 1 y tipo 2, leucemia e hipercolesterolemia.
- Facilita el desarrollo cerebral, que permitirá al menor tener un mejor desempeño.
- Protege contra la caries dental y reduce la posibilidad de necesitar ortodoncia durante la infancia y adolescencia.
- Crea un vínculo afectivo madre-bebé, el cual favorece el desarrollo de la autoestima; brinda seguridad y estabilidad emocional al menor.
El galeno añadió que la lactancia materna también ayuda a la madre, ya que libera oxitocina, lo cual permite que el cuerpo se recupere más rápido después del parto. Además, previene la depresión posparto y disminuye el riesgo de sangrado, evitando una posible anemia.
Cabe resaltar que la Organización Mundial de la Salud recomienda que el periodo de lactancia dure seis meses de manera exclusiva y complementaria hasta los 2 años.